LA Fábrica cuerpo-espacio, impulsa el intercambio y  circulación entre  artistas nacionales e internacionales, quiénes, además de ofrecer un espacio formativo, han involucrado e invitado  a los participantes a entrar en procesos creativos intensivos de 3 a 4 semanas (de 6 a 8 horas diarias), con la finalidad siempre de despertar el deseo de indagar en lenguajes propios y/o  al servicio de un grupo para un montaje final. Estos laboratorios/residencias se han logrado gracias al apoyo permanente del Centro Ecuatoriano Alemán y del Goethe Institut, quienes desde el año 2011 apoyan esta iniciativa, permitiendo entrar en contacto con los universos artísticos de grandes coreógrafos alemanes entre los que destacan Pina Bausch y Sasha Waltz.

 

En el 2015, y gracias al apoyo de la Cía. Les Ballets C de la B de Bélgica (quienes auspiciaron el pasaje de avión), recibimos a la bailarina francesa  Bérengere Bodin para una residencia de dos semanas, la cual culminó con una muestra coreográfica en nuestras instalaciones.

 

Sin duda, uno de los efectos más positivos  que  estos laboratorios han tenido, es la visibilización de nuevos procesos creativos en la ciudad de Guayaquil,  además de lograr una  descentralización de los puntos de formación en danza y una gran circulación de artistas ecuatorianos que se han encontrado/encuentran entre ellos y con artistas internacionales. Además la arquitectura del espacio ofrece la posibilidad de albergar artistas en casa, muchos jóvenes de provincia y los maestros invitados han podido hospedarse en el espacio por un precio muy económico, lo que ha ayudado a recibir gente  de todas partes del país y fuera de él.

De esta manera se ha realizado un mapeo de la danza ecuatoriana que resulta muy inspirador para los artistas locales y que se evidencia cada año. 

 

Con todos estos antecedentes, en diciembre de 2015, recibimos la notificación de que nuestro proyecto del 1er. Encuentro de Danza contemporánea en Residencia “Geografías íntimas” había sido seleccionado por la Ayuda Iberescena para poder ser realizado el año 2016. Y es así que, con este gran impulso, nace este Encuentro que viene a fortalecer lo que veníamos realizando con las residencias, pero a un nivel mucho más significativo, ya que permitió traer a Guayaquil, a coreógrafos y bailarines que marcan, por su trayectoria, un hito importantísimo en el desarrollo del lenguaje escénico y una sistematización de las técnicas y métodos de entrenamiento y creación contemporáneos.